Gran Avance en la «manipulación» de la antimateria con tecnología láser

Gran Avance en la «manipulación» de la antimateria con tecnología láser

 

La antimateria es muy inestable y misteriosa. Sin embargo, se ha logrado «manipular» más de 500 átomos de antihidrógeno con pulsos de láser. Un gran avance para la Física de partículas.

El experimento se desarrolló en las instalaciones del Desacelerador de Antiprotones en el CERN y fue liderado por el Profesor Mike Charlton de la Universidad de Swansea, Gran Bretaña.

En Física de partículas, la antimateria es una versión «contraria» a la materia que conocemos, con antipartículas y anti-átomos, en lugar de las partículas atómicas. Es muy inestable en nuestro «mundo material» (explota), así que se necesita mucho cuidado y fuerza electromagnética para trabajar con ella.

Poder estabilizar antimateria

El objetivo del equipo de Charlton era analizar el comportamiento del antihidrógeno (atrapados en una trampa magnética) y observar las reacciones de esos anti-átomos al ser iluminados con luz ultravioleta. Tal emisión de luz produjo un efecto llamado Transición de Lyman-alpha, donde los electrones cambian de orbital (región en el espacio donde estos se mueven) y liberan energía.

LEAR (Low Energy Antiproton Ring), precursor del Desacelerador de Protones en el CERN. Créditos: CC BY 3.0/Wikimedia Commons/Florian HirzingerLas partículas de antihidrógeno se comportaron igual que los electrones del hidrógeno común, así que es un gran descubrimiento que revoluciona la visión de la Mecánica cuántica. El estudio científico dice lo siguiente:

«Recientemente observado en el antihidrógeno, la transición de Lyman-alfa permitirá el enfriamiento por láser del antihidrógeno, proporcionando así una muestra fría y densa de anti-átomos para espectroscopía de precisión y mediciones de gravedad».

Es un descubrimiento favorable para la Física experimental porque se está pensando mucho en poder enfriar antimateria en el CERN. Si se puede enfriar, puede ser más fácil de almacenar y controlar. Esto permitirá estudiar mejor sus características, explicar su misteriosa presencia en el universo y tal vez utilizar sus propiedades energéticas.

 

Así lo considera el Profesor Charlton: «Esto representa otro avance histórico en la física atómica, el cual debería abrir el camino a la manipulación de las energías cinéticas de los anti-átomos atrapados».