Tecnologías avanzadas utilizadas en el pasado

Cuando hablamos de tecnologías Avanzadas solemos pensar en smartphone, televisores de última generación u otro dispositivo electrónico que se ha mejorado o tal vez inventado en nuestra actualidad. Cuando pensamos en la tecnología de la antigüedad solemos imaginar una serie de artefactos primitivos y rudimentarios de dudoso funcionamiento. Pero no porque en la antigüedad no se haya utilizado los teléfonos inteligentes significa que eran menos avanzados que nosotros, al contrario, las investigaciones han demostrado que los pueblos antiguos crearon y emplearon tecnologías avanzadas que apenas hemos llegado a comprender y aun así la humanidad guarda muchos misterios asombrosos del pasado.
Puertas automáticas, máquinas dispensadoras, calculadoras astronómicas… Veamos pues, 7 grandes inventos y avances tecnológicos creados por nuestros antepasados, que quizás no conocías:
1. El disco Uunartoq
En el pasado, navegar a través de los mares era una tarea extremadamente complicada. Si deseabas ir, digamos, de Europa a las Américas, era muy probable que terminaras en Madagascar, ya que el agua parece la misma en todas las direcciones allí afuera.
Los científicos se intrigaron por conocer la forma en que los Vikingos eran consistentemente capaces de viajar en una línea completamente recta desde Noruega a Groenlandia y regresar por el mismo camino, que equivale a aproximadamente 2,500 kilómetros. Entonces, en 1948, encontraron un antiguo artefacto vikingo en un convento del siglo XI, y concluyeron que era una brújula impresionantemente avanzada.
2. Puertas automáticas para templos
La creatividad de Herón de Alejandría llegó a tal extremo que casi se convirtió en un maestro de los efectos especiales. Ideó un mecanismo para hacer sonar las trompetas cuando se encendía el altar de un templo egipcio, e incluso un sistema para expulsar niebla artificial.
Pero lo que más sorprende es el esbozo un sistema de puertas automáticas para templos, un dispositivo que funcionaba tras el encendido de un fuego, que provocaba la apertura de las puertas en el momento deseado.
3. La copa de Licurgo
La copa de Licurgo es un antiguo cáliz romano. Seguramente te estás preguntando qué puede haber de tecnología avanzada en una copa. Los científicos tampoco notaron nada especial en ella, hasta que la pusieron a contraluz. Tiene un color verde cuando es iluminada por enfrente que cambia a rojo cuando se ilumina desde atrás.
En 1990, investigadores británicos intentaron revelar el misterio tras esta copa. Concluyeron que el vidrio para su elaboración estaba repleto de oro y plata, con granos mil veces más finos que el grosor de un cabello humano. Básicamente, los romanos descubrieron la nanotecnología – la ciencia de la manipulación de partículas extremadamente pequeñas – y la usaron para hacer que una copa brillara con diferentes colores.
Para construir la copa, tuvieron que moler oro y plata en granos mucho menores que los de la arena y fundirlos al vidrio en proporciones específicas para producir los efectos subatómicos que apenas y hemos comenzado a comprender en las últimas décadas.
Por alguna razón, los científicos no tuvieron el permiso para manipularla y experimentar con ella, entonces hicieron su mejor esfuerzo para elaborar una réplica. También concluyeron que, probablemente, la copa también cambiaba de color dependiendo del tipo de líquido que se vertía en ella.
Además, resulta mucho más eficaz en la detección de diferentes tipos de sustancias en el aguaque los sensores modernos, lo que significa que la ciencia está considerando emplear esta tecnología de la época de Cesar para mejorar los modernos detectores de sustancias.
4. El bambucóptero o Taketombo
El Taketombo (literalmente se traduciría al castellano por “libélula de bambú” o Bambucoptero, Alrededor de cuatrocientos años antes de Cristo, y con cuatro palitos bien ensamblados, los chinos pusieron el primer granito de arena en la historia de la aerodinámica. La denominada “libélula de bambú”, es un palito con una pequeña hélice en la parte superior, ha sido utilizado como juguete hasta nuestros días. Hacia 1809, George Cayley se inspiró en su diseño para sus prototipos de helicópteros.
5. El robot programable de Herón de Alejandría
Herón de Alejandría fue un sabio matemático y mecánico griego al comienzo de la era cristiana. Esta mente brillante fue responsable de la primera máquina a vapor, la puerta automática e incluso del primer robot – todo eso durante el primer siglo de nuestra era. Además, los investigadores le dan el crédito por haber inventado el primer robot programable en la historia.
Puede parecer una tontería llamar “robot” a la invención de Herón, sobre todo si tomamos en cuenta que se trata de un carro de madera con tres ruedas movido por cuerdas en lugar de electricidad. Sin embargo, el dispositivo empleaba un sistema de pesos y poleas cronometradas, de forma que podía moverse con autonomía, hacer curvas y rodear a los seres humanos a muy poca distancia.
A pesar de su simplicidad, científicos en computación dicen que básicamente esta es la manera en que todos los robots operan. Es como si las cuerdas fueran una “secuencia de código”. Los investigadores llegaron a construir uno para mostrar que funcionaba y que no se trataba solamente de un producto de la imaginación del griego, dale un vistazo:
6. Pilar de hierro de Delhi
Sabemos que las personas en el medioevo, e incluso antes, tenían la capacidad de revestir materiales con finas capas de metal como el oro y la plata. De hecho, sus métodos funcionaban tan bien que resultan mucho mejores de los que empleamos en la actualidad. Leíste bien: aun no alcanzamos la eficiencia de una técnica de la Edad Media.
El Pilar de hierro de Délhi es una columna situada en el complejo Qutb, en Delhi, India. Fue construida alrededor del año 400 y burla completamente a los arqueólogos y metalúrgicos de todo el mundo, porque tiene 1,600 años de antigüedad y aún no ha sido afectada por la corrosión. Compara esto con tu automóvil 1990 y ya te darás cuenta del logro que significa esto.
Los estudios del pilar muestran que su composición es extraordinariamente rica en fosforo, que parece haber protegido al metal de los devastadores efectos de la naturaleza. Básicamente, éste nutre una fina película inofensiva de óxido que combate a un óxido más profundo y perjudicial. Y no es ningún accidente: obras anteriores no poseen este fosforo, mientras que varias estructuras posteriores fueron forjadas de esta misma forma.
7. Brocas chinas
La sal era un recurso de mucha importancia en el mundo antiguo que servía, entre otras cosas, como un preservante de alimentos mucho antes de que existiera la refrigeración. Sin embargo, cuando se vive en un país tan grande como China, no es tan fácil hacer un viaje a la playa para recoger agua de mar como una practica diaria. Así, los chinos no tenían mucho de donde elegir a no ser que fuera cavar en busca de este oro blanco.
Como consecuencia, inventaron una broca enorme que consistía en una rama de bambú con un poco de hierro al final, que varios hombres usaban para excavar pozos profundos. Estos pozos de sal del siglo III alcanzaban los 140 metros bajo el suelo con toda eficacia.
Los métodos de perforación no sólo eran ingeniosos, sino sofisticados. Los chinos incluso diseñaron todo un repertorio de brocas de perforación para diferentes circunstancias, con protocolos de seguridad incluidos.
Estos pozos que los chinos excavaban también liberaban metano, es por eso que recibieron el mote de “pozos de fuego”. Lo que inicialmente era un problema explosivo se convirtió en un recurso más para aquel pueblo, conforme se fueron dando cuenta que podían emplear ese gas natural para alimentar con energía sus dispositivos antiguos. Transportaban el metano a través de una serie de ductos de bambú de largo alcance que llevaban tanto agua salada como gas a grandes distancias, incluso sobre las calles.
Así como estas tecnologías ancestrales ya mencionadas existen muchas otras más que comentaremos en un próximo artículo, si te gusto este post no olvides dejarnos tu comentario y compartirlo con tus preferidos.