El Oro Monoatómico: Entre la #alquimia, las élites y los antiguos #extraterrestres

Con el incansable propósito de despertar y transmutarse el hombre ha utilizado distintas sustancias, esto podemos verlo reflejado en todos los registros históricos que hacen referencia a la alquimia y a los cientos de hombres, ávidos de sabiduría, riquezas y vida eterna, que engrandecieron este arte oculto y lo trajeron hasta nuestros días.

Curiosamente, los alquimistas no buscaban el oro que todos conocemos, sino una transformación del mismo, es decir, modificaban la estructura tridimensional del oro común, y lo transformaban en una estructura bidimensional.

Un hecho verdaderamente asombroso acerca del enigmático polvo blanco de oro es que no es un descubrimiento nuevo. En la antigua Mesopotamia se lo denominaba shem-an-na, y los egipcios describieron eso como mfkzt, mientras en Alejandría, y más adelante químicos como Nicolás Flamel veneraron eso como un regalo del Paraíso, llamándolo la Piedra de los Filósofos.

Hoy esta sustancia monoatómica es denominada con el término científico de ORME (Orbitally Rearranged Monatomic Element).

En todas las etapas de su historia el sagrado «polvo de proyección» fue reconocido como poseedor de extraordinarios poderes de levitación, transmutación y teleportación. Se dijo que producía una luz brillante y rayos letales, siendo al mismo tiempo la clave de una activa longevidad física.

Los alquimistas y la búsqueda de la “piedra filosofal” que daría la vida eterna y convertiría el plomo en oro.

Pero veamos las tres etapas básicas en el descubrimiento y confección del Oro Alquímico:

1. Antiguo Egipto

La fabricación de objetos de oro para el faraón era llevada a cabo en hornos adaptados a ese fin.

Durante el proceso de fundido y fabricación siempre había residuos y restos de oro que quedaban dentro del horno. Estos restos sufrían el proceso continuo de fundido y solidificación, de enfriado y calentado, puesto que no eran retirados del horno. Con el correr del tiempo, los artesanos descubrieron pequeñas cantidades de un polvo blanco en los lugares donde había residuos acumulados.

A través del proceso alternado y continuo de fundición y enfriado, el oro común se había convertido en un extraño polvo blanco.

Fieles a los impulsos de exploración y experimento propios del ser humano, a algunos artesanos se les ocurrió comerlo. Y allí ocurrió un milagro. Se hallaban ante la sustancia más poderosa del mundo para alterar la conciencia y la fisiología humana.

Sus poderosos efectos permanecían por varios días en quienes los habían consumido y pasado este tiempo estas personas nunca volverían a ser como antes. Se transformaban en «dioses vivientes».

En la actualidad se han hallado varias momias que poseen este polvo blanco sobre distintas áreas de su superficie.

2. India Medieval

En la India encontramos nuevamente la fórmula y la fabricación del oro alquímico.

Llevaba años elaborarlo y era realizado a veces por familias enteras. Una vez obtenido, era ingerido periódicamente en pequeñas cantidades por algunos miembros eminentes de la familia, y luego era heredado por las generaciones siguientes para su consumo.

Para obtenerlo, se envolvían cuidadosamente determinadas cantidades de oro común y se introducían en una hoguera que producía su fundición. Luego se lo enfriaba rápidamente, para volver a fundirlo a continuación, y así sucesivamente, a lo largo de muchos años, hasta obtener el preciado polvo blanco.

Los alquimistas hindúes denominan «Puttah» a este procedimiento.

3. Experimentos actuales

La ciencia actual no ha podido elaborar a través de sus sofisticados medios modernos lo que los egipcios e hindúes realizaban sin problemas hace cientos y miles de años: el Oro Alquímico.

David Hudson descubrió que el oro común, que posee dos átomos, se transforma en un polvo blanco de extraordinarias características físicas si se lo priva de uno de ellos. El oro transformado en polvo blanco alquímico sería un oro monoatómico.

David Hudson construyó un laboratorio especial y logró fabricarlo, aunque hasta hoy no ha podido eliminar la toxicidad existente en ese polvo blanco, algo que las civilizaciones antiguas sí lograron hacer. El oro común es tóxico, pero el oro monoatómico, si está bien elaborado, no lo es, en cambio, tiene propiedades altamente beneficiosas para el organismo; y según los antiguos conocedores de las artes ocultas, consumirlo continuamente volvería «inmortal» a la persona.

David Hudson está dedicado en la actualidad a lograr el oro blanco alquímico sin ningún grado de toxicidad.

El Oro Monoatómico y los Anunnaki

Sitchin afirmó que uan raza extraterrestre llamada los Anunnaki vino a la Tierra en busca de oro, para ello crearon al hombre, para que sirva de mano de obra y ayude a extraer más mineral. Sin embargo, esto no podría estar totalmente correcto.

Otros estudiosos del tema han sugerido que posiblemente lo que buscaban los Anunnaki era el Oro Monoatómico y no el oro común. Esta sustancia que podría salvar su mundo y hacerlos perdurar de manera física por más tiempo, un tiempo con el que los humanos no podemos imaginar.

¿Es acaso posible que existan hoy en día grupos de élite y sociedades secretas que conozcan estos misterios? Algunos hechos parecen sugerirlo.

Efectos del consumo del «polvo blanco»

El consumo de este oro monoatómicopermitiría a una persona procesar infinitas cantidades de información como si fuese un super computador y cuando hubiese absorbido lo suficiente, le permitiría moverse a través de otras dimensiones y cambiar de forma, porque de repente el cerebro estaría activado para abrir esas vastas áreas que no usamos hoy en día.

Representación del oro monoatómico

Curiosamente en el año 2003, en los Montes Bucegi (Rumania), se realizaronvarios descubrimientos, entre ellos, una ánfora misteriosa…

La ánfora estaba llena de un fino polvo blanco. Los investigadores encontraron que la substancia tenía una estructura cristalina desconocida de oro monoatómico, muy difícil de obtener especialmente en su fórmula de gran pureza.

El Sr. “Massini”, sabía de esta ánfora incluso antes de llegar al Monte Bucegi.

El oro en polvo en su forma pura estimula ampliamente ciertas vibraciones y el intercambio de energía a nivel celular y neuronal. Ello produce un acelerado proceso de rejuvenecimiento. Teóricamente un hombre puede vivir en el mismo cuerpo físico durante unos miles de años, siempre y cuando consuma de vez en cuando una cantidad estipulada de oro monoatómico en polvo.

Esto explica muchos aspectos misteriosos de la increíble longevidad de algunos personajes importantes y muestra las intenciones ocultas de la élite mundial, como también explica que antiguamente la gente viviese tantísimos años y sin enfermedades…

Oro monoatómico

Oro monoatómico

 Oro Monoatómico: Entre la alquimia, las élites y los antiguos extraterrestres

Oro monoatómico

Con un anhelo incesante de iluminación y cambio, la humanidad ha recurrido a diversas sustancias a lo largo de la historia, como evidencian los documentos antiguos que mencionan la alquimia y los numerosos buscadores de conocimiento, fortuna e inmortalidad que exaltaron y perpetuaron este arte esotérico hasta la actualidad.

De manera intrigante, los alquimistas no perseguían el oro convencional, sino su metamorfosis; alteraban su forma tridimensional habitual para convertirlo en una estructura de dos dimensiones.

Es fascinante que el misterioso polvo dorado blanco no sea una novedad. En la vieja Mesopotamia se le conocía como shem-an-na, y los egipcios lo llamaban mfkzt, mientras que en Alejandría, y más tarde alquimistas como Nicolás Flamel, lo consideraban un don celestial, nombrándolo la Piedra Filosofal.

Actualmente, esta sustancia monoatómica se conoce científicamente como ORME (Elemento Monatómico Reordenado Orbitalmente).

A lo largo de su historia, el venerado “polvo de proyección” ha sido aclamado por sus impresionantes capacidades de levitación, transmutación y teletransportación. Se le atribuye la emisión de una luz resplandeciente y rayos mortales, y se le considera esencial para el mantenimiento de una vigorosa longevidad física.

El Oro Monoatómico: Entre la #alquimia, las élites y los antiguos #extraterrestres

Los alquimistas perseguían incansablemente la “piedra filosofal”, un legendario elixir que prometía inmortalidad y la capacidad de transmutar metales básicos en oro puro.

Consideremos las tres fases fundamentales en la exploración y creación del Oro Alquímico.

1. Antiguo Egipto

La creación de artefactos dorados para el soberano se realizaba en hornos especialmente diseñados para tal propósito.

A lo largo del proceso de derretimiento y moldeo, siempre se generaban residuos y fragmentos de oro que permanecían en el horno. Estos fragmentos experimentaban un ciclo constante de fusión y solidificación, así como de enfriamiento y calentamiento, ya que no se extraían del horno. Con el tiempo, los orfebres notaron la presencia de pequeñas cantidades de un polvo blanco en áreas donde se acumulaban los residuos.

Mediante este proceso cíclico de derretimiento y enfriamiento, el oro ordinario se transformaba en un peculiar polvo blanco.

Movidos por la curiosidad y el afán de experimentación inherentes al ser humano, algunos orfebres decidieron ingerirlo. Lo que sucedió a continuación fue prodigioso. Se encontraron ante el compuesto más potente conocido para modificar la conciencia y la fisiología humana.

Los efectos intensos de esta sustancia perduraban durante días en aquellos que la consumían, y una vez pasados, estas personas jamás volvían a ser las mismas. Se convertían en “deidades encarnadas”.

En tiempos modernos, se han descubierto varias momias con este polvo blanco esparcido sobre diferentes partes de su cuerpo.

2. India Medieval

En la India, se redescubre la receta y el proceso de manufactura del oro alquímico.

La elaboración de este oro era un arte que tomaba años y, en ocasiones, era una labor compartida por clanes enteros. Una vez creado, era consumido de manera regular en dosis menudas por los integrantes más distinguidos de la estirpe, y más tarde pasaba a manos de las futuras generaciones para su uso.

El método consistía en envolver meticulosamente ciertas porciones de oro ordinario y someterlas al calor de una fogata que inducía su fusión. Posteriormente, se enfriaba con prontitud para ser fundido de nuevo, repitiendo este ciclo durante extensos periodos hasta lograr el anhelado polvo blanco.

Este procedimiento es conocido entre los alquimistas de la India como “Puttah”.

3. Experimentos actuales

La ciencia contemporánea aún no ha replicado con sus avanzadas técnicas lo que antiguas civilizaciones egipcias e hindúes lograban sin dificultad: la creación del Oro Alquímico.

David Hudson descubrió que al privar al oro común, compuesto por dos átomos, de uno de ellos, se transforma en un polvo blanco con propiedades físicas notables. Este polvo sería oro en estado monoatómico.

Hudson erigió un laboratorio especializado y consiguió producirlo, pero aún no ha logrado neutralizar la toxicidad inherente a este polvo blanco, una hazaña que las culturas antiguas sí alcanzaron. Aunque el oro ordinario es tóxico, el oro monoatómico bien procesado no lo es y posee cualidades sumamente beneficiosas para la salud; de acuerdo con los antiguos maestros de misterios, su consumo constante otorgaría la «inmortalidad» al individuo.

En la actualidad, David Hudson se dedica a perfeccionar el oro blanco alquímico para eliminar cualquier vestigio de toxicidad.

El Oro Monoatómico y los Anunnaki

Sitchin sostuvo que una especie de seres de otro mundo, conocidos como los Anunnaki, llegaron a nuestro planeta con el objetivo de obtener oro. Según él, estos seres diseñaron a los humanos para que funcionaran como trabajadores y facilitaran la extracción del precioso metal. No obstante, esta teoría podría no ser del todo precisa.

El Oro Monoatómico: Entre la #alquimia, las élites y los antiguos #extraterrestres

Otros investigadores han propuesto que el objetivo de los Anunnaki podría haber sido el Oro Monoatómico, en lugar del oro tradicional. Este elemento, se teoriza, tendría el potencial de rescatar su planeta y prolongar su existencia física más allá de lo que los humanos pueden concebir.

¿Podría ser que actualmente existan círculos selectos y órdenes ocultas que estén al tanto de estos secretos? Ciertos indicios podrían indicar que sí.

Efectos del consumo del «polvo blanco»

La ingestión de oro monoatómico podría dotar a un individuo de la capacidad de manejar volúmenes ilimitados de datos al nivel de una supercomputadora y, tras una absorción adecuada, facultarle para transitar entre distintas dimensiones y alterar su forma física, ya que su cerebro se activaría, desbloqueando extensas zonas que actualmente permanecen inactivas.

El Oro Monoatómico: Entre la #alquimia, las élites y los antiguos #extraterrestres

Representación del oro monoatómico

De forma intrigante, en 2003, en los Montes Bucegi de Rumania, se hicieron hallazgos notables, incluyendo una ánfora enigmática…

Dicha ánfora contenía un delicado polvo blanco. Los científicos determinaron que la sustancia poseía una estructura cristalina inusual de oro monoatómico, notablemente compleja de sintetizar, sobre todo en una forma tan pura.

El señor “Massini” estaba al tanto de la existencia de esta ánfora incluso antes de su expedición a los Montes Bucegi.

El Oro Monoatómico: Entre la #alquimia, las élites y los antiguos #extraterrestres

El polvo de oro en su estado más puro parece inducir vibraciones específicas y promover un intercambio energético a nivel de las células y neuronas, lo que conduce a un proceso de rejuvenecimiento acelerado. En teoría, una persona podría mantenerse en su cuerpo físico actual por milenios si ingiere periódicamente una dosis determinada de oro monoatómico en forma de polvo.

Esto podría arrojar luz sobre los enigmas de la longevidad excepcional de ciertas figuras históricas y revelar las agendas secretas de las élites globales, así como dar razón de por qué las personas en tiempos antiguos vivían tantos años y mantenían una salud robusta sin enfermedades…

Autor MundoOculto.es