Podríamos estar viviendo en la Matrix

Podríamos estar viviendo en la Matrix, comenta ingeniero

Jim Elvidge comentó sus observaciones acerca de cómo nuestro mundo es como un programa de computador, el 16 de noviembre, en la Cumbre Follow the Truth: The Conspiracy Show en Oshawa, Ontario, Canadá. La cumbre reunió a investigadores que exploran el poder de la mente, vidas pasadas, viaje del tiempo, y mucho más.

Nuestro mundo no necesariamente es un programa informático diseñado por robots parasitarios futuristas, como en la película “The Matrix”. Pero, según el ingeniero Jim Elvidge, tiene un parecido sorprendente con una simulación digital o con un programa informático.

Desde hace décadas Elvidge trabaja con tecnología digital de vanguardia. Tiene una maestría eléctrica de la Universidad Cornell, y varias patentes en el procesamiento de señal digital; publicó artículos sobre la teledetección y sobre otros temas relacionados en revistas analizadas por sus pares. Combinando su conocimiento en sistemas digitales con la mecánica cuántica, Elvidge encontró que podríamos estar viviendo en algo así como en un programa de computador.

La materia, esa “cosa” que vemos, tocamos y sentimos, en realidad es espacio principalmente vacío. Nuestros sentidos nos engañan.

Los primeros físicos ilustraban a los átomos como partículas de pin-ball, todos juntos apilados para formar moléculas. Más tarde los científicos descubrieron que hay un montón de espacio entre los átomos. Y dentro de los átomos, también hay un montón de espacio. Cuanto más nos adentramos en el mundo subatómico, más espacio encontramos y todo parece menos material. Lo sólido y tangible se convierte en etéreo.

En cuanto a qué es exactamente ese espacio, hay varias interpretaciones o teorías. Elvidge lo entiende como datos. Elvidge cree que, a medida que las tendencias en la física de partículas progresan, en última instancia, encontraremos que no hay “cosas” en absoluto; la materia es sólo datos. Y lo que se haya detrás de esos datos es algo así como el código binario de un programa de computador. Por otra parte, la conciencia humana puede vivir en una especie de Internet cósmica, sólo para ser accedida a través de la interfaz de nuestros “cerebro-computadores”.

Un mundo de Datos

Elvidge se basa en las ideas del influyente físico teórico John Archibald Wheeler (1911-2008), quien escribió en su libro “Geons, Black Holes and Quantum Foam: A Life in Physics”: “No es descabellado imaginar que la información se encuentra en el núcleo de la física, tal y como se encuentra en el núcleo de un computador”.

Wheeler resumió su teoría con las palabras “It from bit”, en castellano “Es de bit”.

Todo está hecho de bits; la palabra “bit” es definida como la unidad de información básica, también llamada dígito binario, usada en relación con los computadores.

En su documento “Información, Física, Cuántica: La Búsqueda de Enlaces,” Wheeler escribió: “Cada ‘it’-cada partícula, cada campo de fuerza, incluso el continuo espacio-tiempo en sí, deriva su función, su significado, toda su propia existencia (aunque en algunos contextos indirectamente) del aparato que obtiene respuestas de preguntas sí o no, opciones binarias, bits.

‘Es de bits’ simboliza la idea de que todos los elementos del mundo físico tienen, al final, una base muy profunda, en la mayoría de los casos, una fuente inmaterial y explicación; eso que llamamos realidad surge en el último análisis de la presentación de preguntas con respuestas sí o no y el registro de respuestas evocadas por equipos”.

En las opciones binarias, las preguntas con respuestas sí o no pueden hacer valer la libre voluntad de la consciencia humana. Wheeler lo llamó un “universo participativo”.  Elvidge lo llamó una “realidad digital impulsada por la conciencia”.

Los físicos cuánticos demostraron que la materia existe en un estado indeterminado, u oscilante, hasta que un observador lo fija de una forma particular. Por ejemplo, los fotones pueden existir en forma de ondas o en forma de partículas, pero es el acto de observar lo que determina la forma que adopten; es la conciencia humana que impulsa el cambio.

Este es un experimento mental para ilustrar cómo Elvidge aplica estas observaciones en la física cuántica a nuestra realidad cotidiana en un “sistema digital”.

Un experimento mental Trippy

Imagina que lo que te rodea en este momento, forma parte de una realidad virtual digital. El lápiz en la mesa o la flor en el jardín pueden existir en una forma esencialmente indeterminada. Todo lo que es necesario es información, o bits, que determinan su apariencia exterior. Sólo cuando para mirar ese lápiz lo rompes o miras esos pétalos de la flor con un microscopio, el programa necesita incluir más datos.

Sólo cuando alguien observa algo se convierte en “real”. De otro modo, el interior del lápiz o la estructura molecular de la flor existen como una suerte de potencial indeterminado. Elvidge compara esto con la manera en que las partículas subatómicas parecen unirse a ellas mismas desde una forma indeterminada u oscilante a una forma más estable, ante la observación.

El parecido de su cerebro con un computador

Elvidge no cree que la consciencia se origine en el cerebro. Más bien, que se accede a ella a través del cerebro. La consciencia podría existir en algo como la red de Internet. Comenta que si uno quiere puede llamar a esta red, a este lugar de origen, Dios o divinidad, aunque él no usa esos términos.

“El cerebro es como un cache”, agrega. “En nuestros buscadores, nosotros tenemos caches de los sitios web más navegados recientemente… Un cache es una forma eficiente de procesar información y nuestros cerebros podrían estar haciendo la misma cosa”.

Además, si la consciencia existe allá afuera en una red, puede acceder a información más allá del cerebro, más allá de la experiencia individual de la persona. Él anima a otros a escuchar más a la intuición.

“Ya no tenemos la habilidad de analizarlo todo”, explica. Si uno se tarda mucho en pensar en cómo resolver un problema, en este mundo de ritmo acelerado ese problema habrá cambiado para cuando hayas encontrado una solución. “Tienes que usar tu intuición”, señala.

 “Algunas de las respuestas a esos problemas podrían estar empacados lejanamente en algún lugar de tu cerebro, o tal vez no”, comenta Elvidge. “Si meditas y pides ayuda para resolver el problema, a menudo obtienes esa ayuda”. Esa inspiración podría provenir de otras personas e incluso de otras entidades en el Internet cósmico donde reside la consciencia.

Su entendimiento de que el universo es un sistema digital no significa que él percibe la existencia tan dura, fría y mecánica. Aún existe mucha belleza en “este laboratorio digital de aprendizaje que nosotros llamamos vida, aquí en la Tierra”, agrega Elvidge. En este concepto de realidad digital hay espacio para lo espiritual y lo divino.

Podría ser digital, pero también podría ser ‘Espiritual’

Elvidge citó evidencias de la reencarnación, entre ellas la declaración de la Revista de la Asociación Médica de Estados Unidos de 1975, relacionada con el trabajo del investigador sobre la reencarnación Dr. Ian Stevenson: “En lo que se refiere a la reencarnación él ha recogido, con esmero y sin emoción, una serie detallada de casos… en los que la evidencia es difícil de explicar, desde cualquier punto de vista”.

“En realidad no hay tal cosa como morir, es solo el final de esta simulación”, comenta Elvidge, señalando que “simulación” tiene cierta connotación que él podría evitar, pero usa la palabra para simplificar el concepto. “Espiritual” es también una palabra con ciertas connotaciones, agrega, pero su teoría digital incorpora muchos fenómenos que la gente considera espiritual.

Neils Bohr, uno de los padres fundadores de la física cuántica, encontró en la antigua ciencia china del Taoísmo verdaderos principios de dualidad e interconexión. Ya sea que usted lo llame yin y yang o código binario, es su intento por describir la naturaleza profunda y fundamental de la realidad.

En cuanto a la sabiduría de las antiguas prácticas espirituales, Elvidge dijo, “Estas cosas no salieron de la nada, provienen de las experiencias del pueblo”. Ciertamente pueden contener la verdad para ellos y no deberían ser fácilmente descartadas por atemporales.

¿La esquiva teoría del Todo?

Elvidge espera que la teoría de la realidad manejada por una conciencia digital pueda ser  adoptada como la tan buscada Teoría del Todo. Los físicos han buscado la Teoría del Todo para reconciliar los aparentes desacuerdos entre la física clásica y la física cuántica. Elvidge señaló que esta teoría digital permite a ambas observar el fenómeno.

Mirando a la historia de la ciencia y trazando su potencial curso futuro, Elvidge comentó que nosotros podemos esperar un pronto cambio significativo. En el pasado remoto, agregó, los humanos veían el mundo según limitaciones tribales.

Más tarde, se dieron cuenta que eran varios continentes, todo un planeta, otros planetas y el sistema solar, otras galaxias. Hoy, los físicos teorizan sobre otros universos. Si usted traza esas expansiones de entendimientos en logaritmos en papel, continúa Elvidge, se forma una línea recta. Dice que nosotros estamos “extendiendo exponencialmente los límites de nuestro pensamiento”.