LA POSIBLE VERDAD DE LA ANTIGUA ANTARTIDA

Una breve historia de la Antártida proporciona adecuadamente un contexto de fondo por el cual se puede entender una perspectiva más clara de nuestro dilema actual. Estudios recientes revelan que la Antártida, India y África formaron parte del supercontinente Gondwana, hasta que se separaron hace unos 80 millones de años.

La Antártida estaba repleta de vida animal y vegetal y el paisaje era en gran parte plano y demarcado por un río de movimiento lento. A través del análisis de los sedimentos tanto costa afuera como a lo largo de la costa, en 2013 se determinó que alrededor de 34 a 24 millones de años los glaciares comenzaron a tallar las escarpadas cordilleras y valles que se encuentran bajo la capa de hielo de hoy.

Sin embargo, la teoría del desplazamiento de la corteza sostiene que los seres humanos podrían haber estado viviendo en partes de una Antártida sin hielo hace tan sólo 12.000 años.

Una serie de mapas de la Antártida derivados de culturas antiguas mostró que el continente no siempre estaba cubierto por el hielo. Un almirante turco llamado Piri Reis acreditado con la creación de un antiguo mapa en 1513 representa a la Antártida estando libre de hielo mucho antes de su descubrimiento occidental por dos exploradores rusos en 1820.

El mapa de Reis fue encontrado en el Palacio Topkapi de Estambul en 1929. Adicionalmente, dos décadas después de Reis, en 1534 Oronce Finé compuso un mapa que también mostraba una tierra extraordinariamente precisa y desglaciada.

Otra contribución cartográfica fue el mapa de Orontheus Phynius en 1531 que incluso mostró las montañas y los ríos de la Antártida. Todos estos mapas con una Antártida pre-glacial se aproximan al mapa moderno del continente menos su actual capa de hielo, lo que apunta fuertemente a la evidencia de que los humanos habitaron una vez esta región en un clima hospitalario.

Se cree que estos primeros mapas del siglo XVI pueden haber sido parcialmente compilados a partir de fuentes antiguas que datan de las civilizaciones egipcia y sumeria.

Además de apoyar esta creencia de las antiguas civilizaciones que habitan el continente, los científicos han descubierto recientemente dos grandes pirámides situadas a sólo 15 kilómetros tierra adentro y un tercero cerca de la costa.

La Operación Ice Bridge de la NASA cuenta con expertos que creen que una antigua civilización existió bajo los 2,3 kilómetros de hielo. El equipo de investigadores estadounidenses y europeos creen que podría ser su evidencia definitiva, demostrando que la Antártida no era una tundra helada, sino que estaba repleta de abundantes plantas y animales que incluían seres humanos.

Por supuesto, donde quiera que se descubran las pirámides, la especulación siempre abunda en conectarlas con el contacto extraterrestre. Además, nuevos científicos creen que la ciudad perdida de la Atlántida podría estar bajo la plataforma de hielo continental.

Si estas últimas revelaciones resultan ser verdad, cambiaría para siempre nuestra percepción de la historia. Los egiptólogos y estudiosos han creído durante mucho tiempo que la esfinge egipcia es mucho más antigua que los 10.000 años e incluso hasta 800.000 años de antigüedad.

La erosión hídrica en la estatua más grande del mundo indica que el clima en Egipto probablemente cambió drásticamente de una selva tropical a un desierto en un período relativamente corto de unos miles de años.

Este punto de vista es consistente con las conclusiones de los científicos que estudian el cambio climático en la Antártida, reforzadas por los mapas de principios del 1500 que coinciden notablemente con las imágenes de radar de hoy de la Antártida subglacial en la actualidad.

Además, en los últimos años también se han descubierto enormes estructuras piramidales en México, Sudamérica, China, Kazajstán, Bosnia, entre otros lugares. La construcción de estas misteriosas estructuras gigantescas sólo ha reforzado una afirmación común de que las culturas antiguas de todo el mundo pueden haber sido ayudadas por tecnologías alienígenas avanzadas.

La creciente evidencia científica demuestra que las civilizaciones avanzadas de otros sistemas solares tanto dentro como fuera de nuestra galaxia han emigrado y cruzado con poblaciones humanas en nuestra tierra hace al menos 1,6 millones de años.

Por lo tanto, estos hallazgos más recientes destruyen completamente todo lo que se nos ha enseñado, desacreditando tanto la falsa ciencia de las líneas cronológicas del origen del hombre de hace sólo 10.000 años como la noción de Darwin de que el homo sapiens evolucionó naturalmente desde una célula ameba al simio y finalmente hasta nosotros los humanos modernos.

Nuestro antiguo pasado ha sido deliberadamente enterrado y engañosamente ocultado principalmente por el dogma religioso y político.


Source: Mundooculto.es