Roca del Destino: enigmatica roca de «origen divino» que otorgaría poder a soberanos (VÍDEO)

La Piedra del Destino: antiguo bloque de Escocia. se comenta que posee origen divino y que les otorga poder a los soberanos.

igualmente se le conoce como Roca de Scone o Roca de la Coronación. En la era medieval fue robada por el soberano Eduardo I de Inglaterra (en medio de la guerra con Escocia) y desde anteriormente de 1296, sobre ella se coronaban soberanos escoceses (actualmente se coronan soberanos de Inglaterra y Escocia). Según una leyenda, unos dioses del firmamento trajeron la roca.

Fue tallada de roca arenisca roja. Sus dimensiones son de 66 cm x 42,5 cm x 26,5 cm y su peso es de 152 kilogramos. Posee grabada una cruz latina e incrustada dos argollas de metal para transportarla.

Roca del Destino: origen legendario y enigmatico

La Roca del Destino o Roca de Scone. Cortesía: ashleycowie.com

Una leyenda medieval dice que data de los tiempos bíblicos y que es la roca de Jacob. El Génesis dice que Jacob apoyó su cabeza sobre una roca para dormirse y soñó con una escalera que se dirigía hacia el firmamento (es la «escalera de Jacob»).

El folclore judío dice que esa roca de Jacob se transformó en un pedestal del Arca de la Alianza en el Santuario de Jerusalén. La roca fue transportada por el soberano Gathelus desde Siria a Egipto y despues a España, a raíz de una derrota militar.

Un vástago de Gathelus llevó la Roca del Destino a Irlanda, donde fue coronado soberano sobre la roca. en cambio, más adelante los escoceses invadieron Irlanda y se llevaron la roca hacia Argyll, Escocia.

¿O la trajeron las deidades Tuatha Dé Danann?

Los Tuatha Dé Danann en la pintura Los jinetes de los Sidhes (Public domain).

En Irlanda hay otra Roca del Destino, la Roca de Lia Fáil, la cual fue llevada ahí por los dioses Tuatha Dé Danann, unos entes celestiales que enseñaron el culto druida. Se podría pensar que esta roca irlandesa era parte de una roca sagrada principal de los Tuatha Dé Danann y que un trozo grande fue llevado a Escocia.

Toda esa cronica es legendaria, aunque podría ser verídica. Algo seguro es que el bloque sacro se mantuvo en la Abadía de Scone (pueblo de Escocia) durante cuatro siglos pero fue robado en 1296 por el soberano Eduardo I cuando venció a los escoceses en batallas. Eduardo I llevó la Roca de Scone a la Abadía de Westminster en Inglaterra.

El objetivo era que los soberanos ingleses se coronaran sobre la roca sagrada y automáticamente se declararan soberanos de Escocia. En 1301 se fabricó la Silla de la Coronación, un trono para contener la roca. De forma maliciosa, Inglaterra llegó a firmar tratados para devolverle el bloque santo a Escocia, pero jamás lo hicieron.

Regreso a Escocia

Cuando el príncipe Andrew regresó la Roca del Destino a Escocia en 1996. 

Un acontecimiento de rebeldía se dio el día de Navidad de 1950 cuando unos alumnos se robaron la roca (eran miembros de una organización independentista de Escocia). La policía inglesa sólo pudo dar con los ladrones patriotas debido a un psíquico (!): Peter Hurkos.

Los retratos de los alumnos fueron publicados y por eso decidieron regresar la roca. No fueron encarcelados y los escoceses les llamaron héroes. En 1996, Inglaterra por fin regresa la Roca del Destino a Escocia y desde ese por lo tanto permanece en el Castillo de Edimburgo.

Partiendo de todo lo ocurrido alrededor de la Roca del Destino, su enigma aun es prominente: no se conoce de dónde vino, aunque pudo haber sido traída por los Tuatha Dé Dannan. Tal vez los soberanos de Escocia y Gran Bretaña sepan misterios místicos sobre la roca y por eso es tan notable para ambos naciones.

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