¿A DONDE SE FUERON LOS DIOSES?

Mi deseo de investigar las imágenes de las paredes de las cámaras funerarias de Ramses VI en el Valle de los Muertos en Egipto, estaba en el marco de la búsqueda de información sobre lo que nuestros distantes antepasados sabían de nuestro Sistema Solar.                                                                                                                        

La razón está en el hecho de que los antiguos textos sumerios y egipcios antiguos contenían información sobre una imagen ligeramente diferente de la esfera celeste (cielo estrellado).

En la búsqueda de una respuesta a la pregunta de dónde vinieron los dioses, que a menudo se mencionan no sólo en los textos antiguos egipcios y sumerios, sino también en los textos de otras civilizaciones antiguas, la respuesta se encontró en las paredes de la cámara funeraria De Ramsés VI.

En particular, hay imágenes allí, que contienen información sobre la presencia en nuestro sistema solar de otro planeta asociado con los dioses.

Al parecer, esos dioses una vez vivieron en Marte y Maldek/Tiamat, antes de la catástrofe global que ocurrió en el Sistema Solar hace unos 14 mil años.

La información fue grabada en un lenguaje universal de imágenes. Este lenguaje es curioso, por un lado, porque muestra lo que los antiguos conocían del mundo que los rodea y, por otro lado, da una clave única para comprender la cosmovisión de nuestros antepasados y las imágenes (representaciones) con las que solían describir los acontecimientos naturales e históricos.

Hay una imagen en la pared de la cámara de entierro de Ramses VI, diciendo e ilustrando visualmente el hecho de que en la tercera órbita alrededor del Sol, además de la Tierra, hay otro planeta.

La figura central del cuadro, pintada en amarillo, es el sol. El Sol está en la tradición egipcia del género masculino. El falo y el esperma significan dar vida.

Una delgada línea que atraviesa el plexo solar es una órbita. El plexo solar es la proyección del tercer chacra. Esta es una indicación directa del número de la órbita.

En la tercera órbita alrededor del Sol, se muestran los dos planetas. El Sol está mirando un planeta que es más pequeño en tamaño. El planeta detrás del Sol es más grande en tamaño.

El Sol está mirando la Tierra. Significa que la masa del segundo planeta detrás del Sol es más grande que la masa de la Tierra.

Del análisis de las imágenes de las cámaras funerarias de Ramsés VI y de las imágenes de los techos y paredes del templo de Hathor en Dendera, se puede llegar a una conclusión inequívoca de que en el Sistema Solar existe otro planeta, que la humanidad moderna aun desconoce.

Y los antiguos no sólo conocían la existencia de este planeta, tenían una idea de sus parámetros y el mecanismo de su aparición en el Sistema Solar.

Hay información sobre la diferencia en las masas de estos dos planetas y sobre el hecho de que, para equilibrar estos dos planetas masivos, la Luna fue añadida a la Tierra.

Con la ayuda de la luna, la masa de la Tierra fue aumentada, a través de la masa de la Luna. La masa total de estos dos cuerpos es aproximadamente igual a la masa del planeta más allá del Sol.

Fue a este planeta detrás del Sol, donde los que una vez vivieron en Marte y Maldek/Tiamat, se mudaron al final de la Guerra de los Dioses.

¿DONDE ESTAN LOS DIOSES?

Por Valery Uvarov

Traducido por Birgitte Knaus

 

El hecho de que los “dioses” de nuestros antepasados fueron al planeta detrás del Sol, los antiguos lo sabían muy bien. Los registros sobrevivientes dicen que los “dioses” abandonaron la Tierra repentina y fugazmente.

Su escape rápido fue causado por circunstancias serias, tan serias que los “dioses” tuvieron que romperse literalmente del lugar y abandonar el planeta, usando cualquier vehículo que tuvieran a mano.

Nuestros antepasados que se quedaron huérfanos de la noche a la mañana y, habiendo perdido sus “dioses”, también perdieron la perspectiva de la inmortalidad, que estaba muy cerca de ellos.

Durante mucho tiempo, la gente estaba en la tediosa expectativa de su regreso, pero cuando la esperanza poco a poco comenzó a desaparecer, la gente comenzó a buscar diferentes maneras de llamar de vuelta a los “dioses”.

Los ídolos de piedra de la Isla de Pascua, mirando originalmente al cielo en la dirección a la que se dirigieron los “dioses”, allí aparecieron, imitando a las personas que esperaban a los “dioses” e invitándoles a regresar. Las estatuas de Moai reemplazaron a aquellas personas que, dejando la orilla, aún conservaban la esperanza del retorno de los “dioses” durante mucho tiempo.

La gente soñaba con volver a ese tiempo, cuando tenían contacto directo con los “dioses”. Contacto que abrió una era de extraordinarias posibilidades ante la humanidad.

Posibilidades no sólo en la cognición del mundo y del ser humano, sino también en la perspectiva del desarrollo de habilidades divinas especiales. No es una coincidencia que los textos acerca de ese tiempo digan, que las gentes estaban a sólo un par de pasos antes de la inmortalidad.

Y entonces de repente, se produjeron serios acontecimientos en el Sistema Solar, cuya memoria se había conservado en textos antiguos, como el texto sumerio “Enuma Elish” y en algunos textos egipcios antiguos.

Las circunstancias severas obligaron a los “dioses” a ir al planeta detrás del Sol.

Un número de desastres catastróficos ocurrieron en el Sistema Solar y en la Tierra en aquel período.

Hay información en los registros antiguos, de que nuestro planeta había sobrevivido a varios ataques de asteroides durante los últimos 18 mil años. En particular, la Tierra experimentó tres poderosos impactos de asteroides que arrojaron a la civilización lejos en su desarrollo.

Entonces no sólo se perdió el contacto con los “dioses”, sino también la mayor parte de las pirámides, que una vez fueron construidas en la Tierra, por el consejo de los “dioses”, para el contacto con ellos.

Todo fue destruido: no sólo el complejo de pirámides para las comunicaciones interplanetarias, sino también un tipo especial de estructuras del templo.

Aproximadamente en el tercer milenio AC, cuando el sistema solar se estabilizó después del caos causado por impactos de asteroides, la segunda fase de construcción de complejos temáticos y pirámides para las comunicaciones interplanetarias comenzó en la Tierra.

A la base de los cálculos geométricos de las pirámides de segunda generación, se establecieron parámetros de los nuevos ciclos planetarios y energéticos, que fueron organizados (surgieron) en el Sistema Solar, después de los graves cataclismos planetarios.

Aquellos que recordaban el contacto con los “dioses” y sabían que los “dioses” se encuentran justo detrás del Sol, comenzaron a construir las pirámides, tratando de reestablecer el contacto con ellos.


Source: Mundooculto.es