Conflictos emocionales de las varices

Las várices son dilataciones venosas que se caracterizan por la incapacidad de establecer un retorno eficaz de la sangre al corazón. Las más habituales son las de los miembros inferiores.

¿Qué conflicto emocional estoy viviendo?

Si yo presento várices, quiere decir que soy una persona que deseo más tiempo para mí, que deseo más tiempo libre, que quiero más libertad en mi vida, todo esto, porque “no lo tengo”. Seguramente soy una persona que vivo haciéndome cargo de todo, tengo muchas labores por hacer que me resultan pesadas, cansadas, tediosas y que además, siento una gran preocupación si no las realizo. Sumado a esto, está el hecho de que todo lo que hago, lo realizo sin alegría. Soy una persona que se obliga a permanecer en una situación que odio. Por lo regular las várices aparecen en las piernas, que significan: hacia dónde voy en la vida. En el caso de que aparezcan en otra parte del cuerpo, habremos de obtener la relación.

Pregúntate si vas en la dirección en que quiere ir. Puede ser que estés en una situación que no quieres estar. Situaciones que te causa disgusto. Sentimiento de estar sobrecargado y con exceso de trabajo.

¿Cuál es el resentir?

“Me siento ahogado en esta familia”.

“Hay demasiadas cosas que limpiar en esta familia”.

“Nunca me siento en paz, en casa”.

“Estoy atrapado en una situación”.

“Quiero volver a casa” o “No puedo volver a casa”.

Cuando aparecen úlceras varicosas quiere decir que estoy viviendo 2 conflictos a la vez: conflicto de separación + desvalorización

Por ejemplo: Dejé mi casa o mi país y vivo un día a día en el que nadie reconoce lo mucho que yo hago.

¿Cual es el bloqueo físico?

Son causadas por una dilatación excesiva y permanente de una o varias venas, acompañada de una alteración de la pared del vaso sanguíneo.

¿Cuál es el bloqueo emocional?

La persona que padece de várices es aquella que desea darse más libertad y tiempo libre, pero no sabe cómo hacerlo. Es del tipo que se hace cargo de muchas labores aunque le resulten pesadas y penosas, a causa de que exagera la importancia de sus preocupaciones. Al mismo tiempo le resulta difícil realizarlas con alegría. Puede ser una persona que se obliga a permanecer en una situación que odia. Por otro lado, observa la parte del cuerpo afectada por las várices para saber dónde se sitúa el problema.

¿Cuál es el bloqueo mental?

Cuanto mayor sea la sensación de pesadez que te aportan las várices, más fuerte es el mensaje que recibes de que la vida te parece pesada y penosa. Es momento de saber que no necesitas estar dirigido por el “tienes que”.

Puedes permitirte un descanso temporal sin creer que por ello no eres una buena persona. La vocecita que siempre te empuja a hacer más o a hacerlo mejor, no es la voz de tu corazón. Deja que éste te dirija; él conoce mejor tus necesidades. Elige lo que quieres y lo que amas.

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