Los niños nacidos de padres que viven en una colonia en Marte serán la misma definición de la palabra “marciano”.

En un estudio reciente, los científicos analizaron los desafíos biológicos, sociales y éticos de concebir y dar a luz en otro planeta, algo que inevitablemente ocurrirá en un futuro no muy lejano.

“Suponemos que la reproducción humana en un asentamiento de Marte será necesaria para el éxito a largo plazo de una misión en el espacio exterior”, escribieron los autores del estudio.

“Los problemas centrales son cómo una colonia marciana debería mantener un equilibrio entre los derechos reproductivos y la necesidad de reproducción en el inhóspito entorno marciano”.

Además de los peligros de estar lejos de la atmósfera protectora de la Tierra, un niño nacido en Marte también necesitaría adaptarse al tirón gravitacional inferior del Planeta Rojo, haciéndolos físicamente más débiles.

También existe la preocupación de que los niños nacidos en otros mundos puedan sufrir una serie de problemas de salud debido a la exposición continua a la radiación dañina, tanto antes como después de nacer.

En última instancia, los “marcianos” genuinos pueden incluso clasificarse como una subespecie humana completamente nueva.