Científico advierte que álgida actividad solar causaría un aumento de terremotos en 2025

Científico advierte que álgida actividad solar causaría un aumento de terremotos en 2025

Según un científico «alternativo», se espera un aumento significativo de la actividad sísmica y volcánica para el año 2025, lo cual ya ha captado la atención de numerosos expertos en el campo.

Uno de los principales factores que se mencionan como contribuyentes a este fenómeno son las erupciones solares. Actualmente, la actividad solar se encuentra en su máximo apogeo, lo que podría estar relacionado con el incremento en la frecuencia e intensidad de los terremotos y las erupciones volcánicas.

El aumento de la actividad sísmica está relacionado con las erupciones solares

Estamos acercándonos al punto más alto de la actividad solar, conocido como el ciclo solar 25. A principios de la década de 2000, se registraban entre 5 y 10 terremotos al día, pero actualmente ese número ha aumentado a unos 15-20 terremotos diarios. Este incremento está directamente relacionado con la mayor actividad solar.

El proceso funciona así: el viento solar excita el campo geomagnético de nuestro planeta, generando tensión en la atmósfera, que luego se transfiere al suelo, lo que provoca actividad sísmica. Los datos históricos muestran numerosos casos en los que los fuertes terremotos fueron precedidos por erupciones solares.

Actividad sísmica y ruido blanco

Observando las señales de sincronización en la corteza terrestre, se detecta una simplificación en la estructura del ruido sísmico y un incremento en el radio espacial de las correlaciones, lo que sugiere que los procesos comienzan a mostrar características similares al ruido blanco. Estos cambios suelen estar acompañados por un aumento en la actividad sísmica.

Existe la posibilidad de que megaterremotos como el ocurrido el 11 de marzo de 2011 en Japón se repitan en el futuro. En esta ocasión, no obstante, el epicentro podría estar más cercano a Tokio, incrementando significativamente la amenaza de tsunamis devastadores. Ante estos riesgos, se está invirtiendo en el desarrollo de infraestructuras resistentes a terremotos, a pesar de los altos costes implicados.

Se prevé que la actividad sísmica global de la Tierra aumente en los próximos años, lo cual exige una vigilancia constante por parte de científicos y autoridades.

Terremotos y alineaciones planetarias

Una perspectiva distinta es proporcionada por el renombrado científico holandés Frank Hoogerbeets, conocido por sus predicciones de terremotos significativos, incluido uno importante en Turquía en 2023. Hoogerbeets investiga la conexión entre la geometría planetaria y la actividad sísmica en la Tierra, y anticipa posibles terremotos con magnitudes de al menos 7,8 o más.

Frank Hoogerbeets

Hoogerbeets predijo que la actividad sísmica podría intensificarse después del 24 de enero de 2025, alcanzando su punto máximo alrededor del 27 de enero y en las semanas siguientes. Identifica regiones como África Oriental, Turquía, Grecia, Oriente Medio, Alaska, Canadá y la costa oeste de América del Norte como posibles zonas de riesgo para estos terremotos.

Recientemente, se produjo un terremoto en las Islas Caimán, con una magnitud de 7.6, que sacudió el Caribe.

Además, Hoogerbeets señala que el reciente enjambre sísmico en el mar Egeo, cerca de Santorini, nos recuerda tanto el riesgo sísmico como el volcánico en la región. En un video reciente, ha realizado un análisis detallado de la geología de la zona y las placas tectónicas involucradas.

Predicciones y profecías de terremotos

A lo largo de la historia, muchos videntes han hablado de los desastres naturales a los que podría enfrentarse nuestro planeta en el futuro. Una de las figuras más conocidas es Baba Vanga, que predijo terremotos devastadores y catástrofes naturales que afectarían a varias regiones. En sus profecías mencionó específicamente terremotos a lo largo de la costa oeste de Estados Unidos.

Aunque Vanga no proporcionó años específicos para sus predicciones, habló de un fuerte terremoto en el Océano Pacífico que provocaría un tsunami y causaría numerosas víctimas.

Conclusión

La convergencia de estos diversos factores (erupciones solares, fenómenos de ruido blanco y alineaciones planetarias) apunta a un probable aumento de la actividad sísmica en 2025.

Los científicos y expertos hacen hincapié en la importancia de la preparación y el desarrollo de infraestructuras resilientes para mitigar los riesgos que plantean estos fenómenos naturales. A medida que nos acercamos a un período de mayor actividad sísmica, es crucial que tanto las autoridades como los particulares se mantengan alerta y adopten medidas proactivas para garantizar la seguridad.

Manténgase informado, manténgase preparado y navegue por las incertidumbres de 2025 con conocimiento y resiliencia.

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