En el Universo hay un núcleo de conciencia, que es una grandiosa biocomputadora
Muchos astronautas han experimentado fenómenos extraños en el espacio, asociados con percepciones alteradas y otros procesos inexplicables en el cerebro. Por ejemplo, cosmonautas soviéticos y rusos han reportado escuchar música en la órbita terrestre, una música que parecía venir de todas partes y que no se asemejaba a nada conocido1. En algunos casos, también han visto imágenes del pasado o del futuro2.
Estos fenómenos han sido objeto de numerosos estudios, pero aún no tienen una explicación definitiva. Los neurofisiólogos sugieren que podrían deberse al estrés que el cerebro y el cuerpo experimentan en el espacio3. Sin embargo, estos fenómenos no se replican bajo condiciones similares en una centrífuga en la Tierra, lo que lleva a algunos a especular sobre la existencia de una esfera invisible de información alrededor del planeta, compuesta por partículas elementales desconocidas para la ciencia4.
La teoría de la noosfera, propuesta por el científico ruso Vladímir Vernadski, sugiere que la Tierra está envuelta en un campo de información energética5. Aunque muchos expertos rechazan esta idea, los astronautas continúan reportando experiencias inexplicables que podrían estar relacionadas con este campo6.
Astronautas de diversas nacionalidades han afirmado escuchar voces en el espacio. El astronauta estadounidense Thomas Jones, por ejemplo, compartió información que supuestamente recibió de un interlocutor invisible, quien le habló sobre la creación de la humanidad a partir del ADN de animales y extraterrestres7. Según esta teoría, existe un núcleo de conciencia en el Universo, una especie de biocomputadora que proporciona conocimiento y fuerza a todos los seres vivos8.
Para conectarse con este núcleo de conciencia, es necesario un desarrollo espiritual además del tecnológico. La iluminación espiritual permitiría a las personas interactuar conscientemente con esta entidad, aunque actualmente la mayoría de la gente accede a esta información de manera caótica e inconsciente9.
Las antiguas creencias de India, China y Persia también mencionan una conciencia central, conocida por diferentes nombres como limbo, purgatorio o la morada del Todopoderoso10. Después de la muerte, el alma, que ha acumulado conocimiento, se encuentra en un lugar donde este núcleo de conciencia evalúa sus acciones y decide su próximo destino11.
El astronauta Edgar Mitchell, tras regresar de la Luna, describió el espacio como un enorme templo y sugirió que deberían enviarse pensadores y filósofos al espacio para desarrollar sus habilidades extrasensoriales12. Aunque la ciencia actual no puede confirmar la existencia de una conciencia central en el Universo, estos relatos invitan a considerar la posibilidad de que haya más en el cosmos de lo que podemos comprender con nuestras matemáticas y conocimientos actuales13.
1: BBC 2: Univision 3: Tiempo 4: 20minutos 5: Wikipedia 6: Sosteniblepedia 7: Pijamasurf 8: HuffPost 9: BBC 10: Mis Filosofías 11: AcademiaLab 12: El Comercio 13: Astroingeo