¿Existen criaturas inteligentes ocultas en los misteriosos abismos subterráneos de la tierra?

¿Existen criaturas inteligentes ocultas en los misteriosos abismos subterráneos de la tierra?

 

Se sabe que desde tiempos antiguos, pasaron de boca en boca contadas historias sobre seres sobrenaturales que vivieron en las profundidades de la Tierra. Muchas civilizaciones mitológicas hablan de criaturas extrañas salidas de pozos profundos o cuevas que compartían su sabiduría con los humanos.

Aquí se mencionan diversos tipos de criaturas conocidas por la cultura popular que podrían existir en algún lugar bajo la tierra. Sin embargo, no hay pruebas que demuestren su autenticidad y tampoco hay datos fiables sobre esta teoría.

El Sr. Azadov jamás pensó que los genios existieran antes de que alguien le mostrara una imagen de una criatura parecida a un genio saliendo desde la tierra. Esto ocurrió cuando el director del centro OVNI en Tashkent (Uzbekistán) comenzó a creer en la existencia de estas seres con características sobrenaturales.

Esto ocurrió en el Desierto de Uzbekistán cuando el país estaba bajo la Unión Soviética. Una columna de fuego saliendo del pozo provocó un incendio que atrajo la atención de las fuerzas armadas. Estos bomberos inmediatamente acudieron para sofocar el fuego y ahuyentaron a la gente al escuchar su estruendo.

De repente, el estruendo pareció desaparecer. Lo cual dio un respiro a los militares y petroleros cerca del pozo de petróleo para que escucharan los lamentos de la gente que provenía del interior de la tierra.

Fueron numerosos los testigos que vieron cómo una figura encendida, con barba y brazos cruzados salía del mar. El famoso ufólogo obtuvo una fotografía de lo sucedido, dejándose consignar para la posteridad el sorprendente hallazgo.

Los geólogos, en Siberia, escucharon algo extraño en uno de los pozos más profundos que existían: gemidos humanos. Esta situación impactante fue registrada y presentada a la Academia Soviética de Ciencias; sin embargo, no se tomaron tan en serio el fenómeno y el audio desapareció con el pasar del tiempo.

Reino subterráneo

Las diferentes religiones que se practican alrededor del mundo coinciden en afirmar que dentro de la Tierra hay un lugar misterioso. Aunque cada creencia tiene su particular visión de este asunto, existen ciertas ideas comunes para describir el mundo subterráneo en la narrativa religiosa.

El reino subterráneo está habitado por «maestros» y por aquellos que han perdido la vida, descenderían allí en forma de sombras, almas y diferentes tipos de energías. Estos se conocen como Campos de información y Energía.

Los líderes espirituales y entidades poseen un conocimiento único acerca de la historia así como el futuro. Para recabar esta información es necesario desafiar conceptos tradicionales, verdades convencionales e incluso realizar viajes en los que se permitan a las almas salir del plano terrenal para explorar el reino subterráneo, como sucede en la práctica chamánica siberiana o bien puede lograrse si se ayuda a las sombras a manifestarse.

Las tradiciones de la antigua Grecia mencionan que se tenían que realizar ceremonias religiosas donde era necesario derramar sangre. Profundizando en esta práctica, los eruditos afirman que esto podría ser un método para amplificar la energía y el contenido informativo único representado por la sangre.

Shambala

El aclamado investigador ruso, Nikolay Rerich, fue el primero en intentar entrar en contacto con los misterios de la oculta provincia de Shambala. La región legendaria situada bajo las montañas del Himalaya, era habitada por sabios maestros y así lo descubrió el experimentado descubridor. En su expedición, él obtuvo un importante mensaje dado directamente desde los “maestros” hacia el gobierno soviético.

Ante la muerte de Felix Dzerzhinsky, un experto en asuntos internos de Rusia, todos los planes para la expedición de Gleb Bokiy a Shambala fueron suspendidos debido al falta de financiamiento. El proyecto había sido bajo control por Dzerzhinsky hasta ese punto.

Durante la Segunda Guerra Mundial, una de las órdenes del Tercer Reich, la Waffen SS alemana, organizó varias expediciones a Shambala. Esta iniciativa se relacionó con otras órdenes místicas ya existentes en Alemania antes de aquel conflicto.

Se guardaba mucho celo alrededor de la existencia de seres con habilidades sobrenaturales que habitaban en lo más profundo. Estos trataban de aumentar su poder por medio del entrenamiento espiritual y mental, llegando incluso a superar limitaciones físicas para convertirse en casi divinidades.

Adolf Hitler según algunos historiadores y estudiosos, tenía facultades extrasensoriales. Cuando él logró obtener el poder a nivel mundial, decidió tomar la teoría de una Tierra hueca como oficial y respaldarla políticamente.

El historiador y experto ruso de la magia oculta durante el nazismo, Sergey Zubkov, ha argumentado que la intención de los gobiernos nacionalsocialistas de purificar las razas y establecer sociedades ocultas era facilitar la presencia de seres invisibles a la sociedad. Estos supuestos «maestros» tenían como objetivo asistir a los nazis para reformular el mundo.

Durante la Segunda Guerra Mundial, las SS alemanas tuvieron una unidad específica de investigación encargada de recopilar y recolectar información proveniente de sociedades secretas en Alemania. Estos datos servirían para crear armas mágicas e intentar frenar la incontrolable amenaza bélica.

En 1931, se mandó una misión a la región del Himalaya y el Tíbet para descubrir Shambala, el supuesto reino subterráneo. En esta búsqueda, no se descubrió el lugar que estaban buscando pero sí llevaron de regreso a Alemania muchos documentos de allá. Esto demostraba que los maestros misteriosos realmente existían, lo cual motivó al envío de otras expediciones a aquella área.

¿Que son estas extrañas criaturas que parecen habitar en el subsuelo? ¿De qué lugar vienen y cómo llegaron ahí?

El Dr. Vladimir Khlopkov, experto en investigación de Biolocalización, está convencido de que ciertas criaturas con capacidad sensitiva existen en las profundidades.

La Asociación realizó un estudio para explicar los misterios del planeta años atrás. Los expertos en el campo utilizaron técnicas de rastreo y ubicación biológicas con la esperanza de descubrir algunos signos de inteligencia en la parte interna.

Investigadores aseguran haber encontrado evidencia de inteligencia a un punto bajo la corteza terrestre que supera los 200 kilómetros. Khlopkov se refirió a esto como un intelecto poderoso, pero algo completamente desconocido para el ser humano.

La incómoda situación de las enormes presiones y temperaturas elevadas en los niveles más profundos de la Tierra significa que los seres vivos comunes no pueden sobrevivir en esas condiciones. Sin embargo, ahí mismo es donde podría encontrarse una forma de intelecto en forma de cúmulos de información y energía.

Vladimir Khlopkov fue el primero en descubrir que varias partes de la Tierra se habían visto afectadas por formas de inteligencia extraterrestre. Un lugar en particular donde esto fue sabido fue en Zelenograd, ubicado cerca de Moscú.

Investigadores de biolocalización recolectaron pruebas que sugerían la existencia de objetos extraterrestres aterrizando en el lugar, desencadenando una revisión por parte de los expertos. Estudiando más a fondo, estas huellas se correlacionaron con una falla geológica que los investigadores habían hallado anteriormente.

Los trabajadores que vigilaban la zona cada noche, podían ver un fenómeno biológico extraño que salía desde el boquete y se desplazaba hacia la ciudad de Zelenograd a una velocidad de 90 cm por segundo. La energía misteriosa iba llenando poco a poco todo el lugar.

Mientras el tiempo pasaba, los campos de energía comenzaron a desvanecerse más rápido hasta regresar al abismo profundo. Los resultados de todo este ciclo duró 3 horas y media aproximadamente. Khlopkov afirmó que las categorías estaban obteniendo la información o datos necesarios directamente desde la memoria de los seres vivos.

Fenómenos extraños

En Jakasia, una república rusa, la gente puede explorar una cueva que se conoce como Kashkulakskaya. Esta lugar es conocido por el nombre significativo de «la cueva de un diablo negro» y se encuentra en las impresionantes montañas de Kuznetsky Alatau.

Durante años, los científicos del Instituto de Medicina Clínica y Experimental de Novosibirsk visitaban el lugar con la intención de observar los fenómenos extraordinarios que les pasaban a aquellas personas que permanecían dentro de la cueva por tiempos prolongados.

Siempre que los turistas estaban explorando el recinto subterráneo, algo los asustaba a tal grado que debían huir de ahí. Todos veían la misma imagen cada vez: un hombre vestido con un sombrero de punto con cuernos y con mirada amenazante e imponente.

Los científicos instalaron magnetómetros y otros dispositivos tanto al aire libre como dentro de la gruta. Esto con el fin de contrastar los datos recopilados por los equipos con la sensación de calma que experimentaban los visitantes en el interior de la caverna.

Se observó que los dispositivos ubicados en la cueva detectaban niveles de campo magnético más altos cuando las personas presentes experimentaban nerviosismo. Por contraste, los dispositivos situados fuera de la caverna no mostraron variación alguna durante los periodos de tormentas magnéticas dentro del recinto.

Investigadores que llevaron a cabo un experimento descubrieron algo curioso: parecía existir un artilugio que enviaba señales directamente al espacio, sin contar con ninguna dirección específica. Estas señales eran de naturaleza única, lo que hizo que los expertos sospecharan de la existencia de una forma de radiar información desde el suelo y hacia el cosmos.

La pregunta que nos hacemos es si los misteriosos seres que habitan bajo tierra vinieron desde el espacio y usan las ondas de radio para comunicarse con otros seres en su hogar natal

Michael Harner, conocido antropólogo y estudioso del chamanismo, se abocó a dar respuestas a una gran interrogante. Esto fue de tal forma que organizó un viaje a Sudamérica y se adentró en un poblado indio de la tribu Canibo para vivir lejos de la civilización moderna durante varios meses.

Tras varios días de investigación, la expedición de Harner no obtuvo ninguna información relacionada con la historia local y su religión. Los habitantes indígenas se mostraban muy discretos en sus explicaciones sobre el tema. Durante su estancia entre los nativos, uno de los amigos que consiguió hacer le aconsejó que probara la «bebida sagrada» de los chamanes canibo para profundizar en el concepto sobre dicha creencia.

Durante la ingestión de esta bebida, tuvo lugar una serie de alucinaciones que podrían resolver el misterio en torno a la supuesta existencia de seres subterráneos.

Mientras observaba el Universo desde la Estación Espacial, fue como si retrocediera en el tiempo; regresando a miles de millones de años atrás, cuando la Tierra aún no tenía signos evidencias de vida. Mientras seguía mirando una extraña lluvia de granos negras descendió hasta sentirse cerca y descubrir que eran enormes criaturas con piel brillante, alas como las de los pterodáctilos y cuerpos que recordaban mucho a los de ballenas.

Todo era muy extraño cuando dos seres de otro mundo aterrizaron en la Tierra. Estaban exhaustos después de haber escapado de algo malvado que estaba en el espacio y esperaban encontrar un refugio aquí. Las criaturas me comunicaron a través del lenguaje de los pensamientos que ellos eran los verdaderos propietarios del planeta, creyendo que los humanos eran sus subordinados.

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Cuando los científicos analizaron los resultados de su experimento, notaron un objeto que emitía radiación ascendente hacia el espacio exterior. Esta extraña señal les sorprendió y llegaron a la conclusión de que se trataba de alguna clase de transmisor dirigido directamente al cosmos.

Los relatos de antaño resaltan la presencia de criaturas extraordinarias que poseen un intelecto superior a los humanos. Aún no está determinado si se originaron en la Tierra o provienen de otra órbita fuera del planeta.