Fuego de los dioses, armas mitológicas del pasado antiguo
Fuego de los dioses, armas mitológicas del pasado antiguo
Pero de acuerdo con la mitología hindú, este regalo ardiente fue mucho más allá del uso primitivo de la fundición de metal y la carne para cocinar. En manos de los dioses, el fuego era una herramienta profunda y mortal, capaz de incinerar enemigos y nivelar civilizaciones enteras.
Agneyastra fue una de esas armas, creada por el dios del fuego Agni. Se describió como una flecha llameante que requería un gran conocimiento y habilidad para funcionar. La leyenda dice que Agneyastra fue utilizado por el héroe Sagara para prender fuego a sus enemigos.Otra arma, creada por el Dios Vishnu, fue el Narayanastra, que disparó una diatriba de misiles sobre sus enemigos. Se dijo que la intensidad del fuego aumentaba cuanto más se resistía un enemigo, y disminuía cuando mostraban su sumisión. Para mantener el equilibrio, esta arma solo podría usarse una vez. Si alguien intentara usarlo dos veces, devoraría al usuario y a su ejército de apoyo.
El Brahmastra (forjado por Lord Brahma) fue una de las armas más mortíferas en la mitología. Se requirieron días de intensa meditación para activar, y cuando se disparaba, casi nada podía detenerlo. Tras el impacto, creó un poderoso infierno capaz de aniquilar a toda una nación. El arma también creó un daño ambiental severo (no muy diferente a la lluvia radioactiva). Dondequiera que se arrojara el Brahmastra, la tierra circundante se volvería estéril de toda vida.
Finalmente, estaba el arma más mortal de todos, el Pashupatastra . Se decía que tanto Shiva como Kali poseían este dispositivo, que fue descargado por el poder del pensamiento. Estaba prohibido ser usado contra enemigos menores. Se dice que esta arma catastrófica es capaz de destruir la creación y vencer a toda la vida. El héroe hindú, Arjuna, obtuvo esta arma del Señor Shiva, pero no la usó porque temía destruir el mundo.
Todas estas poderosas armas suenan misteriosamente familiares a las herramientas de destrucción masiva que tenemos hoy. Tal vez los dioses tenían un mensaje para nosotros. No es coincidencia que Oppenheimer, creador de la bomba atómica usara esta cita de la mitología hindú «Ahora me he convertido en la muerte, el destructor de mundos». Vivimos en una era donde el fuego de los dioses está ahora a nuestra disposición. ¿Es posible que haya una razón por la cual Zeus prohibió a Prometeo compartir este conocimiento sagrado? ¿Se nos puede confiar realmente el fuego de los dioses?