Quienes son los numeratis
Stephen Baker, periodista experto el blogs, matemáticas y nanotecnología, está convencido en que podrá desenmascarar a los Numerati.

¿Los Numerati?
Una élite matemática que trabaja para grandes empresas descubriendo, en los rastros que voluntaria o involuntariamente dejamos en la red, una serie de pautas que, entre otras cosas, permitirá ofrecernos publicidad personalizada.
Pero que va más allá. Mucho más allá. Según Baker: “Es un proceso científico y, de los laboratorios de publicidad al contra terrorismo, a cada uno de nosotros se nos ha concebido como espécimen. En algunos casos, nos desmenuzan con gran detalle; en otros, sólo toman nuestra esencia. Como quiera que sea, no hay marcha atrás: este análisis estadístico describirá, estudiará y predecirá nuestra vida cada vez más”.
La acumulación y análisis de los datos que cada día damos sobre nosotros es un laboratorio gigantesco de la conducta humana. “Ya están empleando nuestros datos en modelos predictivos -añade Baker -, y apenas es el comienzo. En la próxima década, casa uno de nosotros generará , a menudo sin saberlo, modelos propios en casi todos los aspectos de la vida”.
Microsoft, IBM o Yahoo, empresas Numerati
El objetivo final no es conocer nuestros hábitos, sino transformarlos: “Si vamos de compras, nos instan a comprar más. Están decididos a aumentar nuestra productividad en el trabajo. Como pacientes, nos quieren más sanos y baratos”. Baker cita a Microsoft, IBM o Yahoo, como empresas Numerati. Nos controlan.
Desde luego, la publicidad es todo un campo abierto. Baker pone, como ejemplo, a Tacoda, una empresa norteamericana cuyo “negocio consiste en recopilar una gran cantidad de datos”, que luego le sirve para examinar nuestra conducta y venderla a agencias de publicidad.
“Esta compañía ha llegado a acuerdos con miles de publicaciones en línea, desde The New York Timeshasta Businness Week -según Baker -. Los sitios web de esas publicaciones autorizan a Tacoda a depositar cookies en nuestras computadoras, que le permiten seguir nuestro recorrido de una página a otra”.
A partir de estos datos, uno y otro lo que hacen es interponer en ese recorrido los anuncios adecuados al perfil del internauta. “Lo que le interesa es nuestra conducta , por lo que no se molesta en indagar nuestro nombre u otro detalles personales”, afirma Baker. Aún así, si quisiera nos tendrían en bandeja: nos espían.
Adivinan a quién votamos y a quién amamos
Y uno de los hallazgos de, por ejemplo, Tacoda, es que han detectado a grupos de internatua que parece navegar en grupo. Primer signo de que, incluso en la red, somos previsibles. En parte, por el escaso número de web en los que la red también se está concentrando. De a .
El hecho de que nos usen como un número, y no con alguien con un sujeto de nombre y apellidos en los datos que comercializan, no supone alivio alguno. “Van a deducir por quién es probable que votemos, con quién deseamos trabajar, a quién podemos amar, todo a partir de modelos estadísticos de datos”.
Y en esos datos se suman, incluso, toda esos rastros que dejamos en nuestras vidas: el teléfono móvil, los portátiles, las tarjetas de crédito, el control de autopistas, los cajeros, la compra de entradas, los libros por la red, nuestros correos electrónicos..
“Cada Navidad -escribe Baker -, los regalos que abrimos introducen más chips en nuestra existencia […]. Estos fragmentos de información resultan casi insignificantes por separado, pero agrupados exponen nuestros gustos y huellas, nuestros hábitos de trabajo, cómo recorremos los centro comerciales y los supermercados. Y estos torrentes de datos dan la vuelta al mundo”.
¿Peligro para tu salud?
Y es lo que hacen los Numerati. Y con ellos, de momento, permitirá que en nuestro ordenador entre publicidad personalizada. Y es algo más cercano a lo que pensamos. Si has comprado en Amazon un disco de un determinado autor, siempre que saque uno nuevo recibirás un mail anunciándotelo. Y es algo que ya sucede.
Pero lo que aún es peor: “Y cuando los números proliferen y los investigadores conozcan más sobre nuestro ADN, los sistemas automáticos darán a hospitales, aseguradoras y organismos gubernamentales la instrucción de seleccionar a las personas”. Y ese día, Baker está seguro, acabará por llegar. Lo que significa que si sufres ciertos riesgos de ser un candidato a ataque al corazón, tu seguro médico dejará precisamente sin cobertura por fallecimiento, por ejemplo, si lo haces a causa de un ataque al corazón.
Sin embargo, no todo es negativo, según Baker ese mismo riesgo cardiopático permitirá instalar programas que aseguren un constante control médico: “Podremos recurrir a la ciencia de los Numerati para protegernos de derrames cerebrales e infartos o buscar el amor en Chemistry.com. La cuestión es que el poder de estas herramientas estadísticas sobre nuestra vida aumentará silenciosamente, si bien podremos aprovechar a tomar los contrales y aprovecharlos”.
¿Nos conocen? Cada día más
¿Cómo? Baker ve una veta de empleo aún no explorada. “Será una oportunidad para que surjan empresas que atiendan a ese mercado creciente. A este respecto, una organización no lucrativa fundada en 2005, Attention Trust, va a la cabeza. Proporciona a los internautas herramientas para acumular sus propios datos y venderlos”. Aunque Baker también desmiente que el mundo esté en manos de los matemáticos y científicos de la computación. “Los modelos que construyen se vendrían abajo si no conducen la conducta humana” Ahí está la veta abierta para antropólogos, lingüísticas e historiadores.
Baker, sin embargo, prefiere un soplo de optimismo: “En realidad no nos conocen, no nos conocerán jamás”. Pero su propio análisis, desmiente esa frase: “Pero cada día, en todos los ámbitos , comprenden y predicen nuestra conducta un poco mejor”.
Aún así, los mayores y más poderosos Numerati -como Larry Page, fundador de Google – controlan sólo ciertos terrenos, según Baker. Aunque es sólo cuestión de tiempo. “Nos suman de todas las maneras inimaginables y tienen toda la humanidad para modelar. El ascenso de esta élite contadora convulcionará industrias enteras”. Stephen Baker ha publicado Numerati. Lo saben todo de ti (Seix Barral)