Un hombre relató haber visto a Ucumar: “Me encierro en las noches y no puedo dormir

El avistamiento de la extraña criatura Ucumar se produjo la semana pasada en plena noche.

El críptido es conocido por varios nombres alrededor del mundo, es el  Yeti  en el Himalaya, el Sasquatch (o Bigfoot ) en América del Norte, el Sisimita en América Central, y en América del Sur es conocido como el Ucumar (o simplemente Ucu) .

Uno de los primeros avistamientos documentados del Ucumar tuvo lugar en mayo de 1958 cuando un grupo de campistas en Rengo, a 114 kilómetros de Santiago de Chile, informaron haber visto lo que solo podían describir como un hombre-mono . Se llamó a la policía para investigar; tomaron informes de testigos, uno de los cuales era Carlos Manuel Soto , quien juró haber visto a un hombre enorme cubierto de pelo en Cordillera, una de las 6 provincias de Santiago.

En 1956, el geólogo Audio L. Pich encontró huellas humanas de 43 centímetros de largo en el lado argentino de la Cordillera de los Andes a más de 4.000 metros de altura. Al año siguiente se descubrieron huellas similares en la provincia de Salta, Argentina. No mucho después, los residentes de Tolor Grande informaron lo que describieron como llamadas espeluznantes que emanaban de las montañas cercanas de Curu-Curu a los reporteros en un coro nocturno. Los gritos, que los lugareños atribuyeron a una criatura conocida como Ukumar-zupai, asustó a la comunidad durante algún tiempo y, según el antropólogo Pablo Latapi Ortega, las tradiciones de estos gigantes hombres-mono continúan hasta el día de hoy en el noroeste argentino.

Último avistamiento del Ucumar

Así que la semana pasada un paisano en la zona de Pasteadero Chico, Metán , en el sur de la provincia de Salta, tuvo un encuentro con el mencionado críptido alrededor de las 21:30 horas del martes 12 de abril de 2022.

A la noche me encierro porque todavía tengo miedo, tuve que ir al médico porque me salía sangre por la nariz, y tenía vómitos y diarrea. También, como es costumbre, me hice curar del susto. Anoche los perros ladraron afuera y se fueron corriendo, pero ya no quería ir a ver qué era”, dijo el baquiano al diario local  El Tribuno , identificando a la criatura como el legendario Ucumar.

Sé que hay todo tipo de comentarios y bromas, pero nunca mentiría. Os aseguro que he visto a esta bestia peluda , como un gran mono, de unos 1,70 metros de altura . En los últimos años y desde hace décadas son muchos los testimonios de personas que dicen haber visto Ucumar en Metán y en la zona de Rosario de la Frontera . No creía en eso, pero ahora lo vi de cerca con mis propios ojos”, continuó.

Y el campesino -que prefirió permanecer en el anonimato para evitar el ridículo- no se equivoca, según los informes, de hecho, en la última década, el Ucumar fue visto al menos 33 veces .

“Acababa de terminar de escuchar un partido de fútbol en la radio. Era una noche tranquila, pero luego escuché que los perros estaban trabajando mucho y corriendo hacia el campo. Pensé que podía ser alguna vaca o caballo, o ladrones que venían a robar maíz, entonces agarré mi linterna y me fui a ese sector, en medio de la oscuridad total”, dijo.

El hombre luego se dirigió a un camino cerca de la casa, donde tuvo el extraño encuentro.

“Los perros estaban asustados y regresaron de inmediato. Cuando enfoqué mi luz hacia adelante, estaba completamente aterrorizado porque había una cosa, era como un gorila grande, peludo y de color oscuro. Caminaba despacio, era muy robusto, miró hacia donde yo estaba y allí vi sus ojos rojos. Luego se fue al monte», aseguró.

La Leyenda De Ucumar

Se dice que el Ucumar es mitad hombre y mitad oso —o simplemente un gran oso con algunos rasgos humanos— y que vive en las selvas del noroeste argentino , también conocidas como las  yungas . En Bolivia se le conoce como Jukumari y habita en las zonas boscosas del Departamento de Chuquisaca. Ambos están relacionados con antiguos mitos peruanos .

Según el folclore, la criatura habita en lo profundo de cuevas ubicadas en valles remotos. A pesar de su enorme tamaño, trepa con facilidad las laderas de las montañas o trepa a los árboles en busca de frutas, huevos o polluelos de aves para alimentarse.

Los montañeros lo tienen como una deidad protectora de los cerros y montañas, a quien le gusta asustar a los caminantes solitarios. Los espera en algún rincón, desde donde de repente se les aparece profiriendo unos gritos horribles. Como tiene la capacidad de transformarse en cualquier ser vivo, a veces, convertido en hombre, imita la voz de un conocido de su víctima, llamándolo a lugares remotos, hasta que el caminante desprevenido se pierde en los barrancos.

El Dr. Manuel Lizondo Borda, en  Estudios de voces tucumanas: derivadas del quichua  (1927) explica el Ucumar de la siguiente manera: «Un hombre casi bestial, feo, peludo, que vivía en la sierra tucumana hace varios años se llamaba así, y que ocupaba mucha atención pública hasta que fue arrestado por las autoridades: se le atribuyen secuestros de niñas. También afirma que con ese nombre se asustaron los chicos, para quienes significaba algo así como un monstruo.

Para las creencias de Colla, es un mono enorme que camina en dos patas por el bosque. El macho uco persigue a las mujeres y la uca, a los hombres. Siempre los llevan a lugares impenetrables, donde los golpean hasta convertirlos en pulpa.

Algunos autores piensan que el oso de anteojos ( Tremarctos ornatus ) que habita en los bosques húmedos andinos podría haber inspirado la mitología detrás de este particular ser.