Este científico mexicano afirmó que vivimos en una matriz holográfica y desapareció misteriosamente después de…

Jacobo Grinberg (1946-?), el científico mexicano que exploró el vínculo entre  la ciencia y lo paranormal, fue un psicólogo e investigador de la conciencia. Realizó experimentos de telepatía y visión extraocular.

El Dr. Grinberg planteó la posibilidad de que, a través de la conciencia, el cerebro humano pudiera tener control sobre el universo en el que vivimos. En el campo de la física, el Lattice es la estructura en la que se encuentra el espacio-tiempo. Para Jacobo, este concepto adquirió un nuevo significado, lo que lo llevó a acuñar el término sintergia, un neologismo que combina “síntesis” y “energía”.

Su teoría propone que a través del proceso por el cual el cerebro humano decodifica la realidad perceptual, es posible establecer vínculos con la Red y, de esa manera, realizar cambios en el espacio-tiempo. Postuló que vivimos en una matriz informativa, a la que llamó “el holograma”, donde es posible interactuar con la realidad perceptual no solo como espectadores sino como participantes activos en la construcción de esa realidad.

A partir de sus experimentos cerebrales, el Dr. Grinberg desarrolló la teoría sinérgica, un término formado a partir de las palabras españolas síntesis y energía.

El Dr. Grinberg también exploró las implicaciones de la paradoja EPR, que afirma que si la teoría cuántica es un modelo completo de la realidad, deberían existir interacciones no locales entre partículas. Su objetivo era demostrar que un sistema cuántico en el cerebro crea una correlación EPR no local entre cerebros humanos. Llamó a este fenómeno potencial transferido (TP), sugiriendo que un cerebro, adecuadamente preparado a través de la meditación, puede interactuar con otros cerebros, tanto cercanos como lejanos, involucrando directamente la conciencia sin transmisión sensorial ni efectos locales.

“Cuando la conciencia es libre, cuando la sensibilidad es óptima, somos lo que es el universo. En definitiva, todo es una manifestación de la estructura cerebral, que a su vez es un modelo de todo el universo. Cuando vemos al otro, nos vemos a nosotros mismos”, afirma Jacobo Grinberg.

El Dr. Grinberg propuso además que su teoría sinérgica podría explicar el surgimiento de la experiencia consciente, que él consideraba como resultado de interacciones multidimensionales complejas. El cerebro inicia una interacción entre un campo energético (campo neuronal) y la estructura espacial, dando así origen a la conciencia.

En contraposición al realismo ingenuo, que sugiere que la realidad existe fuera del observador, el Dr. Grinberg, adoptando una postura ideológica, propuso que la percepción se construye neuropsicológicamente, con información que existe en el espacio como “patrones complejos de energía”. La experiencia consciente, creía, ocurre cuando sintetizamos esta información-energía en el espacio, volviéndose así sinérgica. Los cambios neuronales en el cerebro causan microdistorsiones en el marco del continuo espacio-tiempo, que luego interactúan para crear una “macrodistorsión hipercompleja” del campo neuronal. El resultado de este proceso es la experiencia perceptiva.

En el ámbito de la visión, los componentes de los campos neuronal y cuántico “encajan” en la experiencia, minimizando el ruido producido por su interacción a través de un patrón de interferencia (PI) emergente específico. Este patrón representa la estructura de la experiencia y contiene los componentes perceptuales percibidos como líneas y formas geométricas, concebidas como formas energéticas de alta complejidad. Las percepciones, o imágenes, que vemos “objetivamente” como colores y objetos son en última instancia productos del PI.

Las ideas del Dr. Grinberg están relacionadas con la teoría del orden implícito desarrollada por el físico estadounidense David Bohm, en la que el espacio se concibe como un “mar de potencialidades” holográfico a partir del cual se despliegan explícitamente el universo y la conciencia. En este caso, se resuelve la paradoja de la dualidad onda/partícula cuántica, al tiempo que se preserva el “principio de no localidad” (la capacidad de una partícula de influir instantáneamente en otra).

Durante la década de 1980, el Dr. Grinberg viajó extensamente por todo México para entrevistar a chamanes y curanderos psíquicos, con la esperanza de recuperar la “psicología nativa” y la “sabiduría original” del pueblo mexicano. A partir de sus estudios de casos, concluyó que los chamanes tienen cerebros altamente neurosinérgicos, lo que les permite activar experiencias en múltiples lugares del espacio y manipular la realidad para crear efectos inmediatos y asombrosos, sobre todo materializaciones.

La teoría sinérgica reafirma y desafía la física cuántica al reinterpretar el concepto de la red. El Dr. Grinberg sugirió que, a través de la conciencia, el cerebro humano podría controlar el universo en el que vivimos.

Explicó que una persona con un campo neuronal altamente sinérgico, es decir, un cerebro con mayores enlaces de coherencia, tendría la capacidad de modificar el holograma a voluntad, logrando hazañas que desafían las leyes conocidas de la física, tal como lo hacía la chamán Pachita en sus cirugías.

Esta teoría abre la puerta a la investigación de otros fenómenos, como la telepatía. Grinberg realizó diversos experimentos en los que, a través de la meditación, demostró la sincronía entre dos cerebros expuestos a diferentes estímulos, produciendo resultados similares.

Esta teoría se cruza con algunas ideas fundamentales como la ley de atracción, la influencia del pensamiento en la realidad y la relatividad lingüística, entre otras.

El aspecto más enigmático de esta teoría sugiere que si la conciencia nos permite influir en la matriz informativa, y si todo está conectado a través de la interacción energética de los átomos y los pensamientos, entonces podríamos habitar un plano que no es la realidad total; esencialmente, una Matriz en la que hemos sido colocados, con un cerebro capaz de comprender sus leyes físicas pero no su origen.

De esta idea surge el concepto de despertar, de llevar la conciencia más allá y dominar el holograma. Bajo esta premisa, al comprender plenamente el funcionamiento de la matriz, simplemente desapareceríamos y alcanzaríamos un estado de pureza dentro de la verdadera realidad.

 La ciencia suele rechazar nuevas ideas porque no encajan en lo que se entiende actualmente. Personas como Jacobo Grinberg y Nikola Tesla, que se adelantaron a su tiempo, suelen ser criticadas y menospreciadas porque sus ideas no son aceptadas por la  comunidad científica . Incluso cuando hay pruebas que respaldan su trabajo, pueden perder su reputación.

El Dr. Grinberg intentó cambiar la forma en que entendemos la conexión entre la ciencia y la conciencia. Utilizó el método científico para explorar esta relación. Sin embargo, la ciencia no debería ser demasiado orgullosa como para pensar que lo sabe todo. No debería descartar lo desconocido solo porque no lo entiende.

Esta teoría no pudo verificarse y, al igual que sus estudios sobre la visión extraocular en niños o la telepatía, los proyectos del Dr. Grinberg quedaron inconclusos después de su desaparición en el momento más trascendental de su prodigiosa carrera.

El Dr. Jacobo Grinberg desapareció el 8 de diciembre de 1994 y con él desapareció todo su trabajo. Se ha intentado averiguar qué le ocurrió. A continuación se ofrecen algunas ideas:

1. Algunos piensan que su esposa, Teresa, lo lastimó por un problema personal. Pero luego ella también desapareció.
2. Otros creen que la CIA se lo llevó para que trabajara para ellos. Un juez encontró una pista que sugería que el Dr. Jacobo Grinberg estaba en América del Norte, pero el juez fue repentinamente apartado del caso.
3. El hermano del Dr. Jacobo Grinberg cree que podría haber escapado del mundo, tal como en una de sus propias teorías.

Es curioso que sea más fácil hacer desaparecer a alguien que reconocer su trabajo.

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